
Las historias de vampiros formaban parte del folklore rumano donde sin lugar a dudas se mezclan el mito y la realidad. Esto se debe al largo recorrido que ha tenido la leyenda de la figura Drácula que, aunque fue concebida por el escritor Bram Stoker como una ficción, su inspiración para crear al vampiro más famoso de todos los tiempos, tuvo un asidero histórico: Vlad «El Empalador» (Vlad Tepes en rumano) Pero, ¿Quién fue este personaje que fue tan real como la vida misma?
Se trata de un sádico personaje auténtico rumano. Vlad «El Empalador» no era para nada un vampiro. Sin embargo, las evidencias dan muestra de sus sanguinarios gustos y gestas, lo cual hace que se acercara bastante a un monstruo de carne y hueso. Este despiadado príncipe de Valaquia, de la zona sur del país, se hizo famoso por hacer de la tortura su pasatiempo favorito. Por ello, se gana el sobrenombre de «El Empalador» debido a por su afición a clavar a sus enemigos en estacas.

Revelando la verdadera inspiración de Bram Stoker
Ahora bien, según los historiadores su padre, Vlad Dracul (de ahí lo de Drácula, que en rumano significa ‘demonio’), fue un príncipe perteneciente a la Orden del Dragón, una fraternidad secreta de caballeros rumanos que tenía como objetivo proteger los intereses del catolicismo y luchar contra los turcos. Los miembros de esta orden llevaban una capa negra sobre una prenda roja en días señalados. Este fue el motivo por el que Stoker, conocedor del contexto histórico y buen documentalista, eligió tal atuendo para su personaje de vampiro.
Al irse descubriendo y sacando a la luz las semejanzas del personaje real y el ficticio el interés por Transilvania aumenta. Por lo tanto, cada día más personas alrededor del mundo muestran una gran atracción por visitar tal región. Y es que, más allá de visitar el escenario literario del personaje vampírico, los viajeros quieren descubrir mucho más acerca del personaje histórico y verdadero que esta detrás de Drácula y que sirvió de inspiración Stoker.
El Castillo Poenari
Visitar la fortaleza donde hizo vida esta figura rumana es de gran interés turístico y aunque muchos visiten el Castillo de Bran debido a la popularidad que le dio el personaje literario, la verdad es que su lugar de residencia fue el Castillo Poenari, también conocido como Ciudadela Poenari (Cetatea Poenari en rumano).
Se trata de una fortaleza que, aunque en ruinas, se puede visitar llegando a ella a través de la carretera Transfăgărășan (de las más bonitas del mundo), a unos 25km de Curtea de Argeș, capital histórica de Valaquia. Se encuentra en una posición elevada dentro del valle del río Argeș, cerca de las montañas Făgăraş, en un entorno natural excepcional.
Si estas de paseo por la región dándole un Hola Transylvania a este mágico lugar para descubrir acerca de este personaje llamado Vlad Dracul no dejes de visitar los espacios por los cuales este histórico personaje dejo su huella.